La aerotermia es un sistema de climatización innovador, eficiente y renovable. Se trata de una tecnología que extrae hasta un 75% de la energía del aire para luego introducir dicha energía térmica en el interior de la vivienda por medio del sistema de radiadores o suelo radiante con un rendimiento que puede ser hasta un 400% superior al de una caldera. Mediante la aerotermia es posible conseguir una mayor eficiencia energética en la calefacción y refrigeración de la vivienda, lo cual viene reflejado en sus elevados coeficientes de rendimiento.
Consume menos energía que los sistemas de calefacción y refrigeración convencionales por lo que los gastos de climatización que conllevan los sistemas de aerotermia son muy inferiores, de hasta un 65% de ahorro en comparación con sistemas de gas natural.
La principal diferencia entre sistemas tradicionales de climatización y la aerotermia es el consumo. Con la aerotermia se consigue un
ahorro energético importante, que puede ir desde el 30% y hasta el 50%.
Cuentan también con un mantenimiento muy sencillo puesto que no producen combustión y no generan residuos. No hace uso de combustibles que requieran ser almacenados ni transportados a través de líneas de gas, como tampoco presenta procesos de combustión, humos o residuos, lo cual le confiere un carácter inherentemente seguro.
En resumen: es una fuente de energía renovable y versátil que permite un consumo mucho menor de calefacción en el hogar, al tiempo que provee de ACS y refrigeración en verano y es más respetuosa con el medio ambiente.
Su coste es más elevado y precisa de espacio para alojar la máquina, pero los ahorros que generan hacen que sea rentable en un plazo muy corto de tiempo. Si buscas alternativas mucho más ecológicas, seguras, de fácil mantenimiento y que supongan un ahorro evidente en la factura energética, la aerotermia es una opción perfecta y apostar por su instalación te permitirá contar con todas las ventajas que ofrece.
